jueves, 29 de abril de 2010

Articulo resultante.

El aprendizaje es el proceso a través del cual se adquieren nuevas habilidades, destrezas, conocimientos, conductas o valores como resultado del estudio, la experiencia, la instrucción y la observación. Está relacionado con la educación y el desarrollo personal. En primer lugar, aprendizaje supone un cambio conductual o un cambio en la capacidad conductual. En segundo lugar, dicho cambio debe ser perdurable en el tiempo. En tercer lugar, otro criterio fundamental es que el aprendizaje ocurre a través de la práctica o de otras formas de experiencia.
Pero, ¿cómo influye la música en el aprendizaje? La música estimula el desarrollo y la organización neurológica del cerebro en el sistema nervioso, esto debido al proceso de la experiencia musical ayudando a fortalecer la capacidad de aprendizaje. Durante este proceso las áreas del cerebro (lóbulos cerebrales) se comunican entre sí para que los sonidos (vibraciones con diferentes frecuencias, captadas y codificadas por el oído) que oímos sean interpretados para dar una experiencia subjetiva de la música. Por su efecto sobre las emociones, la experiencia musical provoca la participación de numerosas estructuras cerebrales relacionadas con la motivación y la emoción, también participan procesos cognitivos, como la atención, el aprendizaje y el pensamiento.
Sin motivación cualquier acción que realicemos no será completamente satisfactoria por lo tanto es muy importante considerarla porque resulta fundamental que el estudiante tenga el deseo de aprender.
La concentración es especialmente importante para el proceso de aprendizaje. De ahí que se intente por todos los medios potenciar esta capacidad que es imprescindible para la adquisición de nuevos conocimientos. Si bien la concentración mental es un proceso psíquico que consiste en centrar voluntariamente toda la atención de la mente sobre un objetivo, objeto o actividad que se esté realizando o pensando en realizar en ese momento, dejando de lado toda la serie de hechos u otros objetos que puedan ser capaces de interferir en su consecución o en su atención.
Se ha comprobado que música sedante (música clásica, efecto Mozart, Chill Out, etc.) provoca relajación y para que esto se efectué es necesario estimular la producción de ondas alfa, ondas theta y ondas delta en el cerebro. Entonces junto con la meditación la música sedante es un medio efectivo para mejorar la concentración mental y por consiguiente un mejor aprendizaje.
En conclusión la música influye en el desarrollo emocional y racional del hombre ayudándolo a comprender el entorno que lo rodea de una forma más efectiva provocando la participación de nuestros procesos cognitivos más importantes.

martes, 27 de abril de 2010

INFORMACIÓN


Hay una conexión muy estrecha entre la creación musical y el funcionamiento cerebral y esto ha sido objeto de intensa investigación científica. Algunos investigadores han hallado evidencias de que hacer música ayuda a los jóvenes a desarrollar el cerebro, y a los estudiantes a obtener un alto rendimiento en una variedad de áreas académicas, una vez que comienzan los años escolares.

Los efectos de la música sobre el comportamiento han sido evidentes desde los comienzos de la humanidad. A lo largo de la historia, la vida del hombre se ha visto complementada e influida por la música, a la cual se le han atribuido una serie de funciones. Ésta ha sido un medio de expresión y comunicación no verbal y, debido a sus efectos emocionales y motivacionales, se ha utilizado como un instrumento de manipulación y control del comportamiento de grupos e individuos. También posee una función facilitadora en el establecimiento y la permanencia de las relaciones humanas, así como en la adaptación social del individuo a su medio.

Por otra parte, la música es un estímulo que enriquece los procesos sensoriales, cognitivos (como el pensamiento, el lenguaje, el aprendizaje y la memoria) y motores, además de fomentar la creatividad y la disposición al cambio.

La percepción musical, además de la capacidad de escuchar las notas, los tonos, los acordes, la duración, el timbre y la intensidad, requiere la de percibir las relaciones secuenciales y espaciales de las notas, su melodía, armonía y ritmo.

El proceso inicial del sistema relacionado con la experiencia musical capta los sonidos, que son cambios repetitivos en la presión del algún medio, comúnmente el aire o el agua. Son vibraciones con diferentes frecuencias, captadas y codificadas por el oído y transformadas en señales eléctricas conducidas a través del nervio auditivo hacia el sistema nervioso central. La información llega a la corteza auditiva localizada en la cara lateral de la corteza cerebral (lóbulo temporal). En esta área se recibe y analiza el estímulo auditivo, es decir, aquí oímos. Estas áreas se comunican con las secundarias, que permiten integrar grupos de estímulos acústicos presentados de manera simultánea y también de series consecutivas de sonidos de diferente tono y estructuras acústicas rítmicas.

En los últimos años, ha cobrado gran importancia su función terapéutica (musicoterapia) en una gran diversidad de estados patológicos. Sin embargo, hace falta investigación científica relacionada con la influencia que ejerce en el comportamiento, ya que en su mayor parte las aplicaciones se basan en la experiencia a través de ensayo y error y en el sentido común.